En la previa del acto masivo que encabezará Axel Kicillof, Máximo Kirchner reapareció en el conurbano y no pasó desapercibido. En un acto en el municipio de Moreno junto a la intendenta Mariel Fernández, el diputado nacional y líder de La Cámpora dejó definiciones que resonaron fuerte dentro del peronismo bonaerense: “No sólo tenemos que pensar en el 2025, sino también en el 2027”. El mensaje fue claro, aunque sin nombres propios. En medio del operativo clamor por Kicillof como eventual candidato presidencial, Máximo marcó la cancha y recordó que los proyectos políticos deben construirse con “coherencia, militancia y mirada colectiva”. En otras palabras: sin improvisaciones ni personalismos. “Venimos de años difíciles. Pero si algo nos enseñó la historia del peronismo es que no hay transformación sin organización. Y para organizarnos bien, hay que tener claro el rumbo”, afirmó el hijo de Cristina Kirchner, en un tono pausado pero cargado de significados. Desde el entorno del diputado dejaron trascender que su presencia en Moreno no fue casual. El distrito representa un bastión del peronismo kirchnerista, y su respaldo a Mariel Fernández también fue un mensaje hacia los intendentes que empiezan a mirar con recelo la consolidación del liderazgo de Kicillof en la provincia. Algunos sectores temen quedar relegados en el nuevo armado electoral. La  intendenta  de Paso del Rey, Mariel Fernández. La frase sobre el 2027 fue leída como un pase de factura: mientras el gobernador avanza con gestos de proyección nacional, Máximo recuerda que la discusión también está abierta sobre quién liderará el peronismo post-kirchnerista en el mediano plazo. En esa lógica, La Cámpora sigue posicionándose como un actor clave para el futuro del movimiento. En paralelo, el acto de Kicillof previsto para este fin de semana promete mostrar fuerza territorial. Con respaldo sindical, universitario y de organizaciones sociales, el gobernador busca consolidarse como el referente opositor más competitivo frente al avance libertario. Sin embargo, la reaparición de Máximo en plena cuenta regresiva genera ruido. “No alcanza con buenas encuestas o con ser buen gestor. Hay que construir poder político real, con base militante y contenido ideológico”, lanzó un dirigente camporista presente en Moreno. La interna, así, se recalienta. Mientras algunos ya piensan en la rosca legislativa de 2025, otros ya ponen la lupa en la presidencial de 2027. Máximo, sin levantar la voz, ya dejó su advertencia.