El kirchnerismo decidió internacionalizar el caso de Cristina Fernández de Kirchner. Bajo el slogan “Cristina Libre”, su campaña se inspira en la experiencia brasileña de “Lula Libre”, construyendo una plataforma regional en la que la expresidenta denuncia ser víctima de un lawfare político. Con una agenda que se lanzará esta semana, fuerzas del peronismo enviarán delegaciones a Foros en México y Brasil, donde participarán figuras como Jorge Taiana y Oscar Parrilli, junto a legisladores y representantes del peronismo como Leila Chaer y Tomás Ledesma. La campaña buscará denunciar la “proscripción política” y sumar respaldo internacional al frente electoral bonaerense Fuerza Patria  . La apuesta internacional se fortalece con el apoyo simbólico de Luiz Inácio Lula da Silva, quien visitó a Cristina en arresto domiciliario durante la cumbre del Mercosur en Buenos Aires. Allí, Luiz Lula reafirmó su solidaridad con ella, remarcando sus propias vivencias de persecución judicial, extensión del lawfare sudamericano  . La campaña no se limita a gestos simbólicos: según Gregorio Dalbón, el abogado de Cristina, se presentarán denuncias ante organismos internacionales como la CIDH y la ONU, con el objetivo de declarar nula una condena que el peronismo considera ilegal, arbitraria e inconstitucional  . Desde el Frente de Todos insisten: no puede haber campaña electoral sin poner el eje en esta causa. La senadora Teresa García, voz cercana a Cristina, afirmó públicamente que este reclamo debe articularse dentro del discurso propio del peronismo bonaerense, especialmente en Fuerza Patria  .                                    La estructura regional está lista: en México, el 4 de agosto funcionará un comité en la UNAM con la presencia de dirigentes como Chaer y Ledesma, junto a referentes del partido Morena. En Brasil, participarán en el Congreso Internacional del Partido de los Trabajadores y en otras actividades en Brasilia, coordinadas para subrayar la narrativa de solidaridad transnacional frente a lo que consideran una persecución política  .                                 La campaña “Cristina Libre” marca un giro estratégico: ya no basta con la agenda local. El kirchnerismo busca cruzar fronteras, construir una narrativa regional que interpela al lawfare y posicionar a Cristina como símbolo de una resistencia latinoamericana al autoritarismo judicial. Y en ese relato, el respaldo de Lula no es simplemente diplomático: es estratégico.     ¡No te pierdas ningún detalle de la política argentina y mundial! Síguenos en nuestro canal de WhatsApp: Canal WhatsApp: https://whatsapp.com/channel/0029VbBqLhV4tRroiQaqOB0M Y en nuestra: Red X (EX Twitter): https://x.com/El_Pulso_P