El Senado está en llamas. A pocas horas de haber comenzado la sesión más importante del año, la tensión escaló al máximo entre el oficialismo y la oposición. Con *la Ley Bases* en el centro de la escena, *el kirchnerismo avanzó con fuerza y logró el quórum y comenzó la sesión en medio de cuestionamientos del oficialismo para, desatando un fuerte cruce institucional. Pero el golpe más certero no vino por el lado reglamentario, sino por la imposición de temas sociales que ya comenzaron a debatirse.                          Con apoyo de bloques federales y la UCR, la oposición logró *imponer en el temario proyectos como la moratoria previsional, la emergencia en discapacidad y el financiamiento para universidades nacionales. Se trata de iniciativas que el oficialismo intentó bloquear, pero que fueron habilitadas por mayoría simple. Un revés simbólico, pero también político, que evidencia la *fragilidad del Gobierno en la Cámara Alta*. El núcleo duro del cristinismo, apoyado en sectores del peronismo no alineado, apunta también a a Villarruel, argumentando que no puede garantizar imparcialidad al estar directamente implicada en las iniciativas del Poder Ejecutivo. Desde La Libertad Avanza hablan de “maniobra golpista” y acusan a la oposición de querer *romper la institucionalidad del Congreso*.                              En paralelo, el debate ya empezó a desnudar las internas del oficialismo: *Villarruel se enfrenta a un kirchnerismo que la considera la verdadera arquitecta de la Ley Bases en el Senado*, mientras que los libertarios más duros le reprochan haberse “entregado” a los acuerdos con gobernadores. En este clima caliente, el *oficialismo intenta sostener a duras penas los dictámenes firmados* para la Ley Bases y el paquete fiscal, pero sabe que ya no tiene el control total del tablero. La oposición, por su parte, prueba su poder real metiendo artículos sensibles a la agenda y cambiando el eje del debate. Y por ahora, lo está logrando. El riesgo para Milei y su mesa chica es mayúsculo: si el Senado *modifica artículos clave* o directamente *rechaza los proyectos*, el Gobierno no solo perdería herramientas de gestión, sino también autoridad política en medio de un proceso de ajuste que enfrenta resistencias crecientes en las calles y en las provincias.                                Desde temprano, la Casa Rosada activó reuniones urgentes, (podes leer: Milei convoca a su cúpula en la Rosada antes de la batalla en el Senado¨), con el propio Milei encabezando un encuentro con su cúpula de gobierno. *La amenaza opositora de vaciarle de poder a Villarruel* y tomar el control de la sesión encendió todas las alarmas. En la lógica libertaria, esto no es solo una pulseada parlamentaria: es un combate ideológico en el corazón del sistema político argentino. Y mientras el Gobierno se juega la Ley Bases, *la oposición ya le cambió la agenda. Hoy se debate moratoria, educación, discapacidad. Mañana, todo puede cambiar. Pero lo que ya no está en discusión es que *el Senado dejó de ser un terreno controlado por el oficialismo*.       SEGUINOS EN NUESTRO CANAL DE WHATSAPP PARA ESTAR SIEMPRE ACTUALIZADO https://whatsapp.com/channel/0029VbBqLhV4tRroiQaqOB0M